Foto: My Pirnce??? por thephotographymuse en Flickr.com. Usada bajo licencia creative commons 2.0. |
Muchas mujeres crecen la con idea de la búsqueda de un príncipe azul. Dicho de manera romántica, porque nadie en su sano juicio buscaría algo así. Pero llenan a esa fantasía, y le alimentan constantemente, a fuerza de repeticiones, basándose en imágenes de caricaturas o películas.
Les diré lo que en mis tiempos de secundaria, las chicas a mi alrededor pedían para novio a alguien que fuera: alto, guero, ojos azules, rubio.
(pausa para reírnos)
Ok, en un rancho en el que francamente había pocos güeros, sin muchos que rebasen el 1.70 m de estatura, ojos oscuros como su conciencia porque los ojos azules, ¡ni siquiera había pupilentes de colores! y rubios, eso sí siempre ha habido por estos lares, gracias a L'oreal.
Miss Universo buscando a Mr Universo.
Pero volviendo a la realidad, todas las que a esa edad (entre 14 y 16 años) tenían novio, pues aceptaban ahí al puberto precoz que había logrado vencer sus propios miedos y se había aventado el numerito de pedirles que fueran novios.
Otro punto es que a lo mejor hay chicas que aunque les gusten prietos como el carbón, solo temen que sean objeto de burla si opinan algo distinto a lo que la mayoría.
Por esas épocas francamente yo ni me había detenido a pensar qué era lo que me gustaba., por mi edad 11 a 13 años, de noviecitos no hablaba nada, a duras penas me fijaba en la hora para ver las caricaturas.
Conforme fui creciendo, pues seguía escuchando esa fantasía entre algunas de mis compañeras o amigas aunque ya más atenuada; menos rubios, no tan altos, no tan güeros, y aunque sea que tuvieran ojos biches.
Cuando los chicos empezaron a llamar mi atención y eso ya fue a mediados de bachillerato, donde solo veía de reojo a alguno que otro. Pues sin hacer muchos análisis, mis gustos se definieron por la lógica hormona. Indistintamente, morenazos tirando a prietos, gueros o amarillos, no tan altos, y de una vez flacos.
El 90% de la población masculina en edades cercanas a la mía, cumplían el requisito, los de piel color verde francamente siempre han estado descartados y México todavía no tenía tantos obesos como ahora. Ahora, nada más para hacer un buen filtro, y no tener que complicarme la vida con ese 90% que tampoco se trataba de acaparar, me di cuenta que debía existir un requisito todavía más importante, que fueran listos y les gustara leer (leer de esas mafufadas que me gustan). Ok,quedaron como... pues pocos.
Ahora, pensaba en eso, porque me di cuenta que muchas personas aunque tengan 30 o 40 años persisten con su fantasía, no se rinden, vaya, tampoco se quedan esperando. Se entretienen de cuando en cuando con prototipos realmente radicales a sus supuestos gustos. ¿Pero cuando uno ostenta edades superiores a los 40? a los hombres ¿les siguen gustando de 16? es hasta enfermizo eso. No me imagino de 80 años intentando magullar a un enfermerito de 20. Ni tampoco soportaría esa frustración constante cuando las expectativas rebasan las posibilidades.
En mi caso, mis gustos crecieron, o evolucionaron., y me di cuenta que la calvicie a algunos hombres no les sienta tan mal. Mientras el cráneo relumbre con ideas graciosas y llenas de ingenio. Ya decía yo, Germán Dehesa tenía un lado muy sexy.
No sé si sea resignación, yo creo que simplemente me adapto y soy feliz con mis alcances, y si se ha de tratar de seguir sonriendo al lado de un viejo lleno de arrugas, calvo y corto de vista, pues ¿qué más da?.
2 comentarios:
De este post sale el borrador para una asesoría en elecciones de pareja. Muy bueno. Mi primera viista desde Feedly, saludos desde el apocalíptico mundo posterior a Google Reader.
Genial, -como todo lo que escribes!-, saludos!
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