
En la última reunión que asistí, y evítenme explicar demasiado, pero la cosa es que de repente me entra lo socialité. Sorpresivamente me ví inmersa en pláticas de señoras. Ay amá!
Me cohibo, porque mi corazón se niega a envejecer. Y porque a diferencia de la mayoría de las ahí presentes, mi búnker funciona sin asistentes.
¿Cómo? No tienes "muchacha"?, que difícil es hallar buen servicio en estos tiempos. Cuando yo era joven, mi esposo me dijo te encargas de la casa, pero había buenas muchachas, qué barbaridad, lo que has de sufrir tú solita.
Cajum. Desde hace muchos años, que empecé a vivir sola, y nunca tuve asistente. Juar a duras penas mi precario salario-beca alcanzaba para vivir en esa zona de la ciudad, y uno que otro trapo y una que otra salida y uno que otro gustito. Es más, si dieran premios por hacer maravillas microeconómicas, yo me apunto, quiero concursar.
Total, que hace unas semanas, tomé la oferta que hizo una persona que pasó. Desde Diciembre, desfilan con mayor frecuencia las personas que buscan trabajo doméstico. Siempre les evité, pero no sé, si un día amanecí vulnerable, o porque estoy cerca de otra cirugía, y quiero apapacharme desde ahorita, no quiero deprimirme luego de regresar de un hospital para ver que mi habitación tiene mugre, es mejor reposar pero con el panorama limpio y cristalino.
Así que hice lo que según yo se hace. Como me ofrecieron referencias, solicité sus referencias, copia de su credencial de elector, o comprobante de domicilio. Acordar el costo y alcance de sus servicios.
Yo sé, cuando dije que mi interés, sería por áreas, que iríamos programando., es fácil aterrarse si cuando digo que se limpia a conciencia un espacio, imaginan que limpiarán con cotonetes el piso.
Quedó en traer las referencias un día, que las trajo en otro, varios días después. Apalabramos fecha y hora para su inicio de labores, y no llegó, hasta horas después, vino a preguntar si sí estaba interesada, o me urgía?.
What?.
Última oportunidad en mis adentros, tal día, en la siguiente semana, se deshizo en promesas, y no llegó.
Así que un buen día, una amiga me recomendó a una señora para el trabajo doméstico, vino al siguiente día y en esas estuve, explicando cómo aprieto tuercas en el búnker. Literal, tuve que sacar mi desarmador, jaja porque bendita la hora, se tapó una alcantarilla del patio trasero. Así que ya nos vamos conociendo, jaja no es que no quiera limpiar, es que estoy dando la oportunidad de que lo hagan por mí. No cualquiera sabe cómo funciona un búnker.
Y pensar que aquí en el blog, pedí encarecidamente un asistente, guapo. Ahhh suspiro.
Me cohibo, porque mi corazón se niega a envejecer. Y porque a diferencia de la mayoría de las ahí presentes, mi búnker funciona sin asistentes.
¿Cómo? No tienes "muchacha"?, que difícil es hallar buen servicio en estos tiempos. Cuando yo era joven, mi esposo me dijo te encargas de la casa, pero había buenas muchachas, qué barbaridad, lo que has de sufrir tú solita.
Cajum. Desde hace muchos años, que empecé a vivir sola, y nunca tuve asistente. Juar a duras penas mi precario salario-beca alcanzaba para vivir en esa zona de la ciudad, y uno que otro trapo y una que otra salida y uno que otro gustito. Es más, si dieran premios por hacer maravillas microeconómicas, yo me apunto, quiero concursar.
Total, que hace unas semanas, tomé la oferta que hizo una persona que pasó. Desde Diciembre, desfilan con mayor frecuencia las personas que buscan trabajo doméstico. Siempre les evité, pero no sé, si un día amanecí vulnerable, o porque estoy cerca de otra cirugía, y quiero apapacharme desde ahorita, no quiero deprimirme luego de regresar de un hospital para ver que mi habitación tiene mugre, es mejor reposar pero con el panorama limpio y cristalino.
Así que hice lo que según yo se hace. Como me ofrecieron referencias, solicité sus referencias, copia de su credencial de elector, o comprobante de domicilio. Acordar el costo y alcance de sus servicios.
Yo sé, cuando dije que mi interés, sería por áreas, que iríamos programando., es fácil aterrarse si cuando digo que se limpia a conciencia un espacio, imaginan que limpiarán con cotonetes el piso.
Quedó en traer las referencias un día, que las trajo en otro, varios días después. Apalabramos fecha y hora para su inicio de labores, y no llegó, hasta horas después, vino a preguntar si sí estaba interesada, o me urgía?.
What?.
Última oportunidad en mis adentros, tal día, en la siguiente semana, se deshizo en promesas, y no llegó.
Así que un buen día, una amiga me recomendó a una señora para el trabajo doméstico, vino al siguiente día y en esas estuve, explicando cómo aprieto tuercas en el búnker. Literal, tuve que sacar mi desarmador, jaja porque bendita la hora, se tapó una alcantarilla del patio trasero. Así que ya nos vamos conociendo, jaja no es que no quiera limpiar, es que estoy dando la oportunidad de que lo hagan por mí. No cualquiera sabe cómo funciona un búnker.
Y pensar que aquí en el blog, pedí encarecidamente un asistente, guapo. Ahhh suspiro.
Foto: Delantal, en Flickr, por Charod. Usada bajo licencia Creative Commons, Attribution-NonCommercial, No Derivative Works 2.0