sábado, 13 de junio de 2009

El precio de la arrogancia

Para los jueves, suelo tener planes diversos, la mayoría los invierto en aprender algo nuevo y en afectos. Los demás días procuro a mis quereres, pero lo hago a jalones y estirones, no siempre les pongo toda la atención que quisiera, y con algunos solo platico de pasadita o me limito a mandarles besitos.

El caso es que así de querendona que salí, pues me fui a desayunar con una amiga, me presentó a una amiga suya y pasamos las horas y las risas tomando café y disfrutando muchas calorías. No siempre manejo mi automóvil, de hecho disfruto manejar a ratos, en determinados momentos mi egomóvil y yo somos uno mismo recorriendo la ciudad. Pero dado que hay días que parece que uno paga una manda tratando de cruzar una avenida entre otros pobres diablos, o porque la ruta planeada previamente se acomoda mejor con el transporte colectivo. Soy fan de irme en taxi, los tomaría siempre, de no ser porque haciendo cuentas, los microbuses y camiones son otra buena opción, más barata y llena de realismo mágico. Y el ahorro de energía a nivel mundial se beneficia.

Así que dado que la cita era en el centro de la ciudad, y la última vez que llegué en coche pagué más de 50 pesos de estacionamiento, prometí no volverlo a hacer. A unas cuadras de donde vivo, puedo tomar un camión, atravesar 4 calles y ya estaría en el lugar acordado.
Hasta ahí, en teoría todo es perfecto. En la práctica, tuve un conflicto emocional. El día amaneció confuso. Había elegido una blusa sport, de manga larga, y planeaba irme con mis tenis casuales. Así, luego del desayuno podría darme un paseo por varias calles, chachareando y buscar qué encontrarme. Pero el clima no correspondía con la temperatura ambiental ni con mi temperatura basal. Apenas iba en la peinada y ya estaba acalorada, con todo y el día nublado. Intempestivamente hubo un cambio de vestimenta. Blusa ligera, sin mangas, jeans y unos zapatos de plataforma que me guiñaron el ojo, ya iba tarde, la opción era irme en taxi.
Más convencida por el alto de mis zapatos que por nada, me fui en taxi.

Dicho y hecho, todo salió como lo esperaba. Hacía un tiempo que no sentía tantas miradas sobre mí, descalza a piso mido 1.68, con mis tacones, 1.78 es como tocar el cielo. Las hay de esa estatura sin ayuda, pero no es el caso. Pocas veces mido tanto. Caminé varias calles, me hice de hilos de varios colores y agujas de tejer de tamaños distintos. Revisé todas las tiendas de chucherías, zapatos, revistas, ropa, juguetes y libros.
Ya me había lucido lo suficiente, recibí los piropos de aquí a un mes. Pocas veces me parecen tan atractivas mis piernas, pero con esa altura de ensueño les veo transformadas, el resto de las personas tal vez ni siquiera se fije en eso, pero me da esa impresión de que lucen tan largas y me hacen sentir un mujerón de anca grande. No se me olvida dejar derechita la espalda, pechuga al frente y mirada coqueta. Tal vez entusiasmada por esa sensación, la vida toma otra dimensión.
Luego de muchas calles, decidí que era momento de regresar. Tomé un microbús rumbo a mi búnker.
Después de un carrereado y vertiginoso viaje, arribé a donde siempre. Caminaría las últimas dos cuadras para orear el garbo. Empecé a sentir cierta molestia en una pata. Llegué al búnker sostenida por el orgullo, pero del otro. El que te hace seguir caminando aunque vayas como faquir.
¡Qué nadie vea mi sufrir!.

Los últimos dos días he usado mis tenis para ir a trabajar y hoy a pura chancla. Un pie, ya no está para esos trotes y esos tacones, o se aferra al último vestigio de princesa del guisante que había en mí.
Sí a los tacones de 10 cm, pero solo si voy en coche, y he de caminar sobre alfombras. Buuh. Con esos pucheros, está destinado a quedarse en casa por no entender que lo de HOY es ser todo terreno.



19 comentarios:

. dijo...

pero si no los ocupas estas muy altaa!!!!!!, bueno espero te mejores pronto de tu patrulla, dejo saludoss!!

ceniciento dijo...

Siempre me haces sonreir con tu manera de escribir, me encanta, gracias.

"lo de HOY es ser todo terreno"


^.^

El hombre del traje gris dijo...

Nunca me ha gustado el que la gente le ponga nombre a cosas como el coche, pero el "egomovil" me parece genial, siempre me da mucha risa, jajaja.

Yo sinceramente prefiero andar en bólido, sea cual sea la ruta. Y si creo que no fue una maravillosa idea ponerte esos tacones si ibas a andar a campo traviesa, aparte como ya dijeron no los necesitas...

GERMÁN DIEGO dijo...

Me uno al club de fans de este espacio, ratos divertidos, buena comida y una chica bien guapota que sabe tejer.

hubiera estado buena una foto, espero y no sea nada grave lo de tu pie, 10 centímetros son un resto!! y después de caminar calles y calles, valla.

y todavía caminaste dos calles para llegar a tu casa!! si que partir plaza puede ser doloroso.

descansa este fin de semana y que estés mejor.

Abrazo.

Lulu Flores dijo...

Si, es fatal tomar el micro con ese tipo de calzado.

Yo hace años que renuncié a ellos,si acaso para alguna ocasión mas formal, pero afortunadamente también estoy alta como tu y mi maridín algo más bajito, así que vivan las chanclas, los tennis y los choclos.

Ojalá se te pase pronto el dolorcito y pues para la otra algo un poco más bajito o de tacón corrido.

Saludos!!

Cl@udette dijo...

Hace algunos ayeres las plataformas y los tacones altos eran mi maximo.....despues de la operación tuve que dejarlos de manera forzada, pero entiendo perfecto lo que dices, se siente una delicia andar con esos modelitos, claro que son para princesas que van de la casa al lugar y de regreso, eso de las excursiones ya son presunción :P asi que espero que sane pronto el pie y para la proxima mejor unos flats son lo más recomendable

Besos

Jo dijo...

jeje yo a veces debo de verme como si no hubiera tardado una hora en arreglarme, pero ahora uso mucho el mantra ese que dice slow y camino apacible disfrutando las aceras rumbo al andar diario.

Mis zapatos sin ser extremos, comódos y acanalados aunque haga frío muy temprano, me agrada que estilizen las piernas y las formas del cuerpo. Cumplen su papel sexy aun cuando digan que la polémica está puntiaguda entre la estética, la crisis y la traumatología pero aun montada en rascacielos a veces si.. es más el ego.. que se nos sube al cielo jeje no hay queperder el horizonte o el semblante aun en zapatito de tacón...

ahora si encajó bien este post con el titulo del blog :P

un abrazo zereth

Exenio dijo...

Piernas, blusas vaporosas (ah, eso no, creo que no escribiste eso), tacones... miradas.

Espera, es que casi dan las 2 y media y me quitaste el poco oxigeno que estaba acumulado por acá... deja me vuelvo a concentrar.


.


.


.


no se pudo... :-S

Myself dijo...

muy fresca tu lectura...


saludos

Para mi pretchi... dijo...

Hola Doc..
Que rico, la verdad se me antojo ir por el centro de Guadalajara en taxi con tiempo para ver muchas tiendas. Con zapatos altos pero la triste realidad es que ya no los aguanto mucho.
Que te mejores del pie.

Sofy

Ale dijo...

chica....que nunca te falten los todo terreno, hace años aprendi la lección, nunca me fallan.
Uno aprende a veces a callos jeje.
Saludos doc.

MAR dijo...

HOLA¡¡ TE IMAGINE CON TUS PLATAFORMAS PASEANDO POR TODO EL CENTRO.
PERO SI ERES MUY ALTA, REALMENTE NO NECESITAS MUCHA AYUDA.
QUE SE MEJORE ESE PIE.
SALUDOS

Sr. Presidente dijo...

jajajaja si, es como cuando te caes o te pegas con algun objeto en la calle, y uno hace como que no duele, pero en realidad uno va apreando esa parte mas sencible de nuestro cuerpo que es el cerebro para no llorar... y uno se soba uno mentalmente... que cosas..!!! que de cosas!!! este fin de semana llegaré a la ciudad de México con rumbo al Bajío, llevaré zapatos comódos, aunque pierda el estilo... caminaré y caminaré...

IVAN CABRERA dijo...

huy! si eres alta, me confieso nuevamente fan de tu blog y de tu belleza, ah! cuida tus lindos piecitos,saludos!

El hombre del traje gris dijo...

"Eres alta y delgadita tu hermosura me provoca..."... ah no verdad... se me vino a la mente la cancion con el comentario del iguano..."que se quede como el oso, devisando pal camino...."

La Balada Despeinada dijo...

yo diario llego a meter mis pies en sales.. pero la cosa es que, a mi los tacones (subsidios como cariñosamente los llamo) me causan el mismo efecto que a ti, me hacen sentir mas no se, mas salerosa..

Pilar Nieto dijo...

jajaja no pain, no gain... además dicen que la belleza cuesta no? jajaja... Antes no te costaron los millones y el acommpañante te miró feo diciéndote que esos zapatos nunca te los ibas a poner!!!

Así me pasa a mí... a veces no los aguanto ahhh pero todo sea porque el chamorro luzca y se me vean piernas del millón... aunque tenga qué usar tenis el resto del mes!

Besos

El Aletz dijo...

Ja!!
Yo por eso ya no uso tacones ASH ASH ASH

Zereth dijo...

Gracias a todos por sus comentarios, ya quedó lavada la afrenta. Regresé pero ahora con tenis, y pisoteé muchas más calles... aunque hubo menos piropos.
Lo anoto en Victorias pírricas.

Otros chismes de este mismo blog

Blog Widget by LinkWithin