Vengo a contar mi desventura, aciaga mi vida.
Sucede que donde vivo, hay un jardín comunitario, cercano al búnker. Disfruto cuando hacen fiestecitas, a veces actúo como invitada involuntaria, me río con las funciones de payasos, los disfraces de los niños; la última vez, me asombraba cuan grande era el inflable que habían colocado, era un palacio inmenso!. Otras tantas veces he escuchado sus conversaciones, no soy el tipo de vecina fisgona, evito incomodar a alguien e incluso el episodio de la cama que chirría, me reí a discreción para no ocasionarles daño psicológico.
Pero, aquí viene lo no tan grato. Casi a diario he padecido del sonido de balonazos a alguna de las paredes de la casa, eventualmente a la puerta trasera. Si tan solo vendiera los balones que han caído y he devuelto, mi cuenta bancaria iría en franco crecimiento. Creí, ilusa de mi, que solicitarle a un chico de 15 años(aprox) que pateara hacia otro lado, que mi recomendación acerca de que le encargaba que no golpeara a las paredes o puerta funcionarían. No.
He llegado al punto la semana pasada de preguntarle, cómo puedo explicarle que su constante golpeteo es incómodo casi al punto de molesto, con lo que recibí un sí, ya no lo haré... tan falso como tantas otras veces.
Hoy, mi acompañante y yo, decidimos devolver el balón, cuando regresara acompañado de su madre. Nosotros aterrizamos poco en el planeta, nos hace falta roce social a veces en exceso, sin embargo tratamos de ser lo más civilizados posibles, argumentando algo que para nosotros es básico, nos agrada que haya chicos que jueguen y hagan deporte, el único punto que buscamos es que sea grato para todos, sin esos molestos golpeteos ni la constante interrupción de nuestras interantísimas actividades solo porque otra vez alguien envió el balón hacia dentro del búnker.
Aquí hay algunos puntos que me llaman poderosamente la atención,
Sucede que donde vivo, hay un jardín comunitario, cercano al búnker. Disfruto cuando hacen fiestecitas, a veces actúo como invitada involuntaria, me río con las funciones de payasos, los disfraces de los niños; la última vez, me asombraba cuan grande era el inflable que habían colocado, era un palacio inmenso!. Otras tantas veces he escuchado sus conversaciones, no soy el tipo de vecina fisgona, evito incomodar a alguien e incluso el episodio de la cama que chirría, me reí a discreción para no ocasionarles daño psicológico.
Pero, aquí viene lo no tan grato. Casi a diario he padecido del sonido de balonazos a alguna de las paredes de la casa, eventualmente a la puerta trasera. Si tan solo vendiera los balones que han caído y he devuelto, mi cuenta bancaria iría en franco crecimiento. Creí, ilusa de mi, que solicitarle a un chico de 15 años(aprox) que pateara hacia otro lado, que mi recomendación acerca de que le encargaba que no golpeara a las paredes o puerta funcionarían. No.
He llegado al punto la semana pasada de preguntarle, cómo puedo explicarle que su constante golpeteo es incómodo casi al punto de molesto, con lo que recibí un sí, ya no lo haré... tan falso como tantas otras veces.
Hoy, mi acompañante y yo, decidimos devolver el balón, cuando regresara acompañado de su madre. Nosotros aterrizamos poco en el planeta, nos hace falta roce social a veces en exceso, sin embargo tratamos de ser lo más civilizados posibles, argumentando algo que para nosotros es básico, nos agrada que haya chicos que jueguen y hagan deporte, el único punto que buscamos es que sea grato para todos, sin esos molestos golpeteos ni la constante interrupción de nuestras interantísimas actividades solo porque otra vez alguien envió el balón hacia dentro del búnker.
Aquí hay algunos puntos que me llaman poderosamente la atención,
- ¿Es el búnker poseedor de una fuerza electromagnética específica para balones, y con la que no cuenta la casa del niño?
- ¿El fenómeno solo es perceptible para los que habitamos el búnker pero jamás para los padres del implicado?
- ¿Alguien sabe si ese asunto de la civilidad y la buena convivencia vecinal está todavía en uso en este planeta?
Pues regresó la madre y el niño. Hubo una conversación breve., nos empeñamos en mostrar nuestra intención de buscar soluciones y no problemas, alabamos y defendimos que es muy bueno que el chico haga deporte y juegue... pero hubo un momento en que la madre intentó molestarse con nosotros, argumentando que eran nuestra pared y puerta las que lamentablemente estaban ahí... aunque se disipó, o al menos eso creí, cuando creí oportuno recalcar que nuestro interés era una convivencia grata y solo esperaba que pudiéramos resolver la situación sin el ánimo de provocar la menor molestia... se despidió diciendo que tomará medidas y procurará evitar que siga sucediendo.
Mantengo la esperanza, pero sinceramente a estas alturas lo dudo mucho.
A mí me pueden mandar por un tubo, pero intenté hacer lo que creo correcto. La tentación de no devolver los balones existió, pero no puedo evitarlo, pienso que era lo más sencillo (punto bueno) pero agresivo y menos civilizado (punto malo), así que inviable (1-1=0).
Mea culpa, mea culpa pero yo quiero creer, en algo que tal vez dejó de existir.
¿Cómo anda el mundo allá afuera?
Foto: Balón de reglamento de rahego. Usada bajo licencia creative commons attribution 2.0 Generic.
Mantengo la esperanza, pero sinceramente a estas alturas lo dudo mucho.
A mí me pueden mandar por un tubo, pero intenté hacer lo que creo correcto. La tentación de no devolver los balones existió, pero no puedo evitarlo, pienso que era lo más sencillo (punto bueno) pero agresivo y menos civilizado (punto malo), así que inviable (1-1=0).
Mea culpa, mea culpa pero yo quiero creer, en algo que tal vez dejó de existir.
¿Cómo anda el mundo allá afuera?
Foto: Balón de reglamento de rahego. Usada bajo licencia creative commons attribution 2.0 Generic.
13 comentarios:
La Mamá de Patito dice,
Así es Doc, como te comento...pon la queja formalñ y documéntala.
Si la molestia sigue, involucra a la policía, porque ya con una queja previa y fotos o video es más fácil que los multen o tomen acciones, porque hay gente que no entiende que no vive sola,y que su libertad termina donde la de los vecinos empieza.
Besitos
Ay mana, cuánto has escrito y yo en la babilonia.
Pero, ¿sabes? te entiendo. Cuando me mudé a la laticueva tooodos los niños de la cuadra (hartos) decidían jugar afuera de mi casita... en la escalera (sólo sirve para mi casa y la de la vecina), y todo se escuchaba
Era latagrinch
pero yo creo que después de ver mis jetotas, se fueron alejando, al menos, a la banqueta. Será el sereno, pero casi ya no los escucho... pero no están pateando m mi pared.
Eah, me robo los chilaquiles, pero es la edición de aniversario y te quiero ahíiiiiiiiiiiiiiiiiiii!
Besos.
Que te puedo decir de la convivencia vecinal, mas que es algo muuuy complicado. Creo que aplica esa frase celebra de Benito Juarez: "El respeto al derecho ajeno es la paz".
Espero que este comentario si se guarde porque llevo 2 post sin comentar por lo mismo...
NIDIA
JAjaja con respecto a la Casa del Mezcal... ah que tiempos, esa es una cantina, auqnue ya noes como antes, vale la pena ercirdar y psar de vez en cuando por un Cedron....
jajaj maldito teclado, ¿por qué no ayuda a disimular el alcoholismo? chale.. todo es culpa del pg
Uuhmm... yo también alguna vez "patié" la pared de algún vecino, emm... no lo haciamos a propósito, solo que no sabíamos que la pelotilla causaba tal efecto en el jacalito que solíamos golpetear...
Por sus quejas la señora que vivía dentro se ganó el apodo de "la bruja del 71" (si, eramos muuuy niños..)
Que apodo te pondrán a ti???
Think about it...
jejejejeje
Aletz
Es complejo y casi siempre desmotivante enfrentarse ante la ausencia de civilidad en la sociedad actual; pareciera que el menor contacto con el vecino es lo mejor, la desconfianza es el punto de arranque.
Pienso que siempre vale la pena hacer el esfuerzo por ser mejor ciudadano, siempre existe la esperanza de que la actitud se multiplique.
Saludos
Monilla gracias por tus consejos y por escucharme, jeje me ha servido bastante.
Latagrinch, jaja ya estoy ejercitando la jetota, a ver si la saco a relucir un día de estos.
Cometa, muy cierto, ahora habrá que preguntar si los vecinos (padres del niño) alguna vez escucharon la frase.
Mole negro, pero no somos tan exigentes, hace mucho que no la visito pero no le haría el feo.
Salud!!
Aletz, alguna vez, eso no es difícil de comprender, salvo cuando lo has mencionado casi durante 2 años, devolviendo balones 3-4 veces por semana. El apodo es lo último que me afligiría, si para unos soy mamassssssita, coleccionar adjetivos peyorativos por parte de algún grupo de gente sería hasta como parte del plan de equilibrio universal.
Roberto, amiguito, quiero creer.
No hay más, la próxima vez que suceda un clavo solucionará tus problemas, sin aire el balón ya no hará el mismo sonido en tu pared...
Para que la civilización si las cosas se pueden solucionar a golpes!!!!
Te cuento... mi mamá aplicó la misma que tu... nunca entendieron... al parecer mi zaguán tiene las mismas dimensiones que una portería semi profesional jajaja... el caso es que balón volado, balón quedado... después de muchos intentos por recuperarlos y ninguno con éxito, optaron por buscarse otro lugar en donde patear a gusto... Aquí es donde aparecen las piedritas en medio de la calle y los botes de frutsi.
Saludos
Pily
Yo tambien creo que si ya no se soluciona asi civilizadamente que involucres a la policia, nimodo si no entienden con palabras con acciones lo haran..
Yo jugaba con los otros chamacos del edificio en el que vivo. Luego de unos años ya no jugábamos pero vinieron otros chicos a golpear puertas, paredes y ventanas como lo hice yo con mis contemporáneos; igual yo quería quejarme cuando golpeaban mi puerta pero junto con mi derecho a quejarme por eso, recorde que yo cuando tenía la edad de ellos no tenía otro lugar donde jugar.
Entonces pense que talvez los papás deberían en general promover el deporte con los hijos y llevarlos a inscribir a equipos de lo que prefieran para que gasten sus energías en otro sitio como un deportivo, donde pueda jugarse mas agusto, con mayor provecho en la práctica, con porra en las gradas y ante los reflejos de flamantes trofeos de plástico pintado de vinci dorada, el entusiasmo es lo que cuenta.
Pero bueno, me llevo la frustración de no haber recibido ese tipo de atenciones y de que ni a mi mismo se me haya ocurrido en su momento irme a inscribir en un equipo de futbol o mínimo de canicas, en las que por cierto era mejor jugador, claro, sin contar aquella vez en sexto de primaria cuando gané el torneo en la escuela con los Demonios Negros... yo era el defensa central con el dorsal 9, de haberme visto algun buscatalentos de la fifa, seguro no sería Rafa Marquez el que estuviera en el Barcelona... pero bueno, me retire ese año de las canchas... y...
y esto ya parece un post, por lo que mejor lo detallo y termino en mi blog antes de que me pases la factura.
Saludos Zereth.
PUES MI ESTIMADA DOC....POR AHI DICEN QUE NO HAGAS LO NO TE GUSTARIA QUE TE HICIERAN....ASI QUE ESPEREMOS QUE EN ESTA OCASION YA LE CAIGA EL "20" A LA MADRE DEL ADOLESCENTE Y TOME MEDIDAS AL RESPECTO....HOY DIA HAY GRAN DIVERSIDAD DE CANCHAS DE FUTBOL 7 PORQUE NO VE LA OPCION DE MANDAR AL PEQUEÑO DEMONIO A DESFOGAR POR AHI SUS INQUIETUDES
SALUDOS Y SUERTE
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